Hasta la ladera se agota de pernoctar en su estática
vigilia.
Su mirada se fatiga, de tanto ver y no apartarla de su muda percepción.
De mirar el sol
cálido en su brillar constante, individual
y certero
como tibia
indiferente, los sentidos y las ansias , sin contemplar la tierra que yace
sólida, muda y
nutriente…
Qué pena que el
astro rey sólo se observe en su aislado afán!
Qué triste que
se difumine en su contemplación parcial.
No infiere que
la tierra como buena madre, le acoge y nutre para que su brillo noble refracte
e irradie.
No nota que
allí, en su costado terreno, se esconde el viento para reposar su raudo
trayecto…
No sabe que de
sus entrañas brotan los manantiales que sacian su sed y empapan su fluvial
emoción!
Cuando el astro
rey internalice la fusíón alquímica de los elementos…se volverá a retomar el
equilibrio mágico de la creación…
Y ése y solo
ése día la tierra dará sus frutos henchida del gozo de prodigar sus mágicos dones.
…desde una STRONGONIKAMENTE.